jueves, 31 de enero de 2013

Pequeña reseña de Alvarito.

 
 
La reseña que escribo es pequeña, como para hacerse una idea de quién fue mi hermano Alvaro.
Después de cursar sus estudios en la ciudad de Huancayo en el Colegio Particular "San Juan Bosco" vino a esta ciudad de Lima con el propósito de prepararse para los estudios universitarios, los mismos que alternaba con entrenamientos para aprender a torear, que era su vocación escondida. Así fue que habló con mi padre y él lo inscribió en la Escuela taurina de Acho.
 
Mi padre lo llevaba a los compromisos taurinos que él tenía, lo hizo debutar en la plaza de toros de la localidad de Chauca- Huaral y en otros festejos, destacándose entre ellos una actuación al lado de los novilleros Paquito Céspedes y Rafael Cano (mi hermano mayor) con toros a muerte de la ganadería Diezmo Palcan en Huayllay -Pasco.
 
El año 2001 decidió enrrumbar a España en busca de oportunidad y aprender mas de lo que sabía, llegando a radicar en la ciudad de Zaragoza donde alternaba sus entrenamientos en la plaza de La Misericordia de esa ciudad y el trabajo que había conseguido. Pero lamentablemente el 07 de Octubre del 2002 un accidente de trabajo le privó de su valiosa vida dejando sumidos en una profunda tristeza a toda la familia.
 
 El diario "El Pregon de Aragon" dio la noticia en España y la revista  taurina "Palmas y Pitos" de Perú  en su edición Nº XXXVIII número 70  después de dar la noticia también dijo:  "Dicen que los buenos se mueren jóvenes. Lo cierto era que Alvarito era un chiquillo sano, lleno de ilusiones, decidido y valiente. Con esa aureola espontánea fue a parar a tierras extrañas y lejanas. Siguiendo la tradición familiar desapareció en su Ley, luchando por abrirse camino con el sudor de su frente y  con  las ansias de su afición torera."
 
Ahora que nosotros sus hermanos menores, que ya alcanzamos la mayoria de edad, encontramos documentos de la creación de la Fundación en memoria de él, que mi padre había creado el año 2007 y trabajaba muy callado sin mayor publicidad ni nada, siempre con los objetivos que eran pensamientos de Alvarito de "ayudar al mas nesecitado ", después de varias consultas con amigos taurinos que nos apoyarán para ayudar, retomamos el funcionamiento de la Fundación que lleva el nombre de: "Fundación Vocacional Benéfica ALVARITO" cuyo eslogan es: Ayudanos a Ayudar.
 

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